AP: ¿Qué piensa ahora cuando ve su filmografía?
Soderbergh: La siento como una gran película, como capítulos de una sola novela. Hay continuidad, hay evolución. Rodé "Sexo, mentiras" en 35 días y "Candelabra" en 30 días. Soy más económico. Probablemente las haría todas unos minutos más cortas. Mientras más corta, mejor.
AP: El receso del cine del que tanto ha hablado ahora es inminente. ¿Cómo se siente?
Soderbergh: He estado un poco más tranquilo. Mi deseo de reflexionar sobre mi relación con el cine puede ocurrir mientras hago estas otras cosas. Me cuesta no hacer nada.
AP: Recientente tuiteó una novela corta, "Glue", y dio un amplio discurso sobre cómo Hollywood podría funcionar mejor.
Soderbergh: Fue una oportunidad de organizar en un solo lugar muchas cosas que había dicho en entrevistas o en bares. Simplemente fue un modo de estructurarlo todo, de expresarlo y cerrar la puerta. Mientras atravesaba la puerta de salida sentí que había cosas que quería conmemorar sobre lo que he visto.
AP: Se sintió como un adiós.
Soderbergh: Paso mucho tiempo tratando de descubrir cómo puedo optimizar mi proceso como cineasta, y no he visto mucho esfuerzo por parte de los estudios para optimizar sus procesos. No lo comprendo. El mayor obstáculo a esta revisión del paradigma es el costo de sacar una película convencional. En realidad es la cola la que mueve al perro. Influye en cada decisión a todo nivel. No puedo creer - a menos que haya algún aspecto entre la relación de los estudios y los propietarios de los cines que desconozca - que este sea el único modo de hacerse.
AP: ¿Ha sido su retiro igualmente motivado por su frustración con la industria y su deseo de crecer de nuevas maneras como cineasta?
Soderbergh: Sí, absolutamente, es una combinación de muchas cosas diferentes. Algunas tienen que ver con el modo en que el negocio funciona ahora, algunas con mi deseo de tomar distancia del aspecto social del cine. El hecho de que uno es objeto de decenas de miles de preguntas. Es un proceso muy intenso y uno puede agotarse después de un tiempo. Y también por mis propios sentimientos hacia la gramática, el lenguaje de esto: ¿Existe alguna otra manera de transmitir y difundir información que no sea tan prescrita? Es muy posible que termine haciendo algo diseñado para verse más en un museo que en un cine.
AP: La sexualidad privada de "Behind the Candelabra" tiene similitudes con la de "Sexo, mentiras y video".
Soderbergh: Fue un gran modo de expresar mi gratitud por un tipo de película que he visto toda mi vida pero nunca logré hacer, un melodrama en cierto modo. Lo vi como una forma de estar en la línea de todas las películas de Douglas Sirk y "Sunset Blvd" ("El ocaso de una vida") y "All About Eve" ("La malvada") y "Valley of the Dolls" ("El valle de las muñecas"). Fue interesante echar una mirada a mi alrededor y preguntarme cuándo volveré a hacer esto.